ESTUDIO BÍBLICO #237
DOMINGO, 11 DE SEPTIEMBRE DE 2022
TEMA: EL MISTERIO DEL SÉPTIMO SELLO
Dr. William Soto Santiago
Sábado, 20 de septiembre de 1997
(Segunda actividad)
Chinandega, Nicaragua
Escritura: Apocalipsis 8:1-5
LAS DIEZ VÍRGENES Y LA GRAN TRIBULACIÓN
Dr. William Soto Santiago
Domingo, 12 de enero de 2014
Cayey, Puerto Rico
El reverendo William Branham dice que los gentiles llevarán el Evangelio a los judíos como los judíos lo trajeron a los gentiles. ¿Y qué indica eso? Si son Moisés y Elías los que van a ir con la Palabra a los judíos, y los gentiles lo van a llevar a los judíos, entonces van a aparecer estos ministerios primero en medio del cristianismo, aunque no los identifiquemos…; pero las vírgenes prudentes, recuerden, van a identificar esos ministerios.
Aunque las vírgenes insensatas no lo identifiquen… Aunque habrá una bendición para las vírgenes insensatas con la apertura del Séptimo Sello en la manifestación de la Tercera Etapa, de la cual habló el reverendo William Branham.
Ahora, el ministerio de Elías y de Moisés son los que van a llevar el Evangelio a los judíos. ¿Cómo va a ser el Evangelio del Reino para los judíos? Eso es algo que se deja quietecito por el momento, para que no vayan a visitarlos personas que vayan a desviarlos del Programa Divino.
Los judíos van a reconocer a Moisés y Elías, van a reconocer a los Dos Olivos, van a reconocer estos ministerios. Sabrán que no será literalmente Moisés sino un profeta como Moisés, un profeta dispensacional, un profeta mayor. Y el ministerio de Elías será – y Elías viniendo por quinta ocasión será un profeta como Elías, en donde Dios por medio de Su Espíritu Santo opere el ministerio de Elías en el Día Postrero.
Y en la misma forma será el Séptimo Sello. Así como el Sexto Sello es Moisés y Elías, los Dos Olivos, el Séptimo Sello es la Venida del Señor a Su Iglesia. Y de eso no vamos a explicar hasta la Tercera Etapa, hasta que venga la Tercera Etapa en el cumplimiento de la Visión de la Carpa. Ahí es donde va ser abierto todo el misterio completamente, y Cristo va a obrar por medio de Su Espíritu en medio de Su Iglesia todo lo que ha sido prometido.
Pero para que tengan un cuadro claro… Sé que algunos, cuando llegue ese tiempo, van decir: “¡Pero eso era lo que yo creía, yo sabía eso!”. Las palabras para esa persona serán las mismas que Cristo dijo a Pedro: “No te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos”.
Fue dicho… El reverendo William Branham dijo también: “Estoy construyendo una plataforma para alguien más, que venga y se pare en ella”. También dijo: “Estoy construyendo una plataforma para mi Señor”.
Si es el precursor, se va a parar el precursado en la plataforma que él le preparó, la plataforma bíblica. Todo lo que él dijo acerca de la Venida del Señor preparándole el camino, va a estar basado en lo que el precursor dijo ahí; y todas las Escrituras de la Biblia estarán ahí presentes, basado en todo lo que la Biblia dice que es lo que el Espíritu Santo dijo a través del reverendo William Branham, el precursor de la Segunda Venida de Cristo, y de lo cual el Espíritu Santo nos dio más luz de esas promesas de la Segunda Venida de Cristo.
(…) La Séptima Trompeta es la que suena Dios por medio de estos ministerios. Página 128, párrafo 1143, dice [Citas]:
1143 – “Debajo de la Séptima Trompeta es para Israel (recuerde, la Séptima Trompeta para Israel) … es para Israel lo mismo que el Séptimo Sello fue para la Iglesia”.
En palabras más claras, por cuanto el Hijo del Hombre, Cristo, viene con Sus Ángeles… y Sus Ángeles son los Dos Olivos. Y esos Dos Olivos son los ministerios de Moisés y Elías repitiéndose en el Día Postrero.
Lo que será para la Iglesia-Novia del Señor Jesucristo, para las vírgenes prudentes, lo que será el Séptimo Sello, la Venida del Señor; será para los judíos la Séptima Trompeta: Moisés y Elías.
Cuando la Iglesia sepa, conozca el misterio del Séptimo Sello, el misterio de la Venida del Señor, podrá decir: “Conozco también el misterio de la Séptima Trompeta, el misterio de los Dos Olivos”.
Como fue en el Monte de la Transfiguración, en donde Cristo estaba mostrando el orden de Su Segunda Venida. Aparecen allí: Cristo glorificado, y Moisés a un lado y Elías al otro lado; ese es el orden de la Segunda Venida de Cristo. Viene con Sus Ángeles, que son Moisés y Elías, los ministerios de Moisés y Elías repitiéndose.
En otra ocasión hablaremos más claro sobre este tema, ya que el reverendo William Branham dijo que no convenía hablar… Le fue dicho a él que no hablara ciertas cosas de la Tercera Etapa y de lo que él vio en el cuartito pequeño. Y esto es porque el enemigo trata de copiar todo lo que la Iglesia-Novia lleva a cabo. Por eso algunas veces ustedes encontrarán que salen personas tratando de imitar lo que Dios ha prometido que va a hacer. Y todo eso el enemigo lo hace para engañar a la gente, para que cuando lo verdadero se realice, la gente diga: “Eso es lo mismo”.
Pero el reverendo William Branham dijo: “De esto no habrá copia, de esto no habrá imitación”. Solamente puede haber una imitación cuando la gente ya saben sobre lo que está prometido y comienzan a tratar de imitar lo que va a venir. Pero este misterio del Séptimo Sello el enemigo no lo conoce.
Lo van a conocer las vírgenes prudentes plenamente en el tiempo correspondiente: en el cumplimiento de la Visión de la Gran Carpa Catedral que vio el reverendo William Branham, donde el Espíritu Santo va a estar obrando, la Columna de Fuego va a estar allí, el Ángel que acompañaba al reverendo William Branham va a estar también allí; y no solamente el reverendo William Branham, de seguro van a venir también los mensajeros de las diferentes edades; pero sobre todo, el reverendo William Branham va a estar allí.
Es que para el pleno cumplimiento de la Tercera Etapa, tendrá que ocurrir, ocurrirá, la resurrección de los muertos en Cristo y la transformación de los vivos.
¿Cuánto tiempo estará La Gran Carpa Catedral que vio el reverendo William Branham, funcionando hasta que ocurra la resurrección de los muertos y la transformación de los vivos? No lo sabemos. Pero el tiempo que sea, comparado con la eternidad será muy corto, y comparado con el tiempo de Cristo hacia acá también será muy corto. Pero ocurrirá lo que ha sido prometido por el Señor.
Nos toca a nosotros estar preparados, y prepararle al Señor las cosas que Él dijo que tengamos listas para Su Venida: al pueblo, y lo que Él necesita tener físicamente para Su manifestación.
Miren, la Escritura decía que el Mesías vendría en un burrito, en un pollino hijo de asna. El que criaba aquel pollino, que tenía una burrita y nació ese pollino, ese burrito…, quizás todos lo que tenían burritos querían tener también burritos, burra y burros, pensando: “Cuando el Mesías venga, yo quiero tenerle un pollino, un burrito, que nadie se haya sentado en él”. Igual que todas las madres judías deseaban ser instrumento para dar a luz al Mesías. Y vean ustedes, Dios se proveyó de ese burrito usando a un hombre que tenía ese animalito, y a la madre de ese animalito; el Señor lo necesitaba y allí estaba disponible para Él.
Para el Día Postrero, conforme a lo que vio el reverendo William Branham… Recuerde, todos desean y creen (y es normal) que Cristo en Espíritu Santo está en su iglesia, en su congregación; y eso está correcto. Y para el Día Postrero habrá una Gran Carpa Catedral, en la cual Cristo va a estar manifestado y nos va a dar la fe para ser transformados y raptados.
Y no importa en qué país estén las personas: eso lo verán a través de satélites, a través de internet, a través de televisión; y recibirán, donde estén, la fe para ser transformados y raptados. No tendrán que irse al lugar donde esté La Gran Carpa Catedral que vio el reverendo William Branham. Ahí estarán los que son de ese lugar y algunos que estarán de visita en algunas ocasiones, y los que siga Dios llamando para darles salvación y vida eterna.
Pero los que están en otros países podrán permanecer en el país donde vivan; y desde allá quizás verán tan nítido todo lo que está pasando en ese lugar, a través de la pantalla de televisión.
Por lo tanto, no hay que preocuparse. Si las personas viven en otra nación, no estén pensando: “Yo me voy para el lugar donde se esté cumpliendo la Tercera Etapa, en el cumplimiento de la Visión de la Carpa”.
Es importante entender estas cosas para no perder el hilo de la revelación divina. Porque la persona que pierde el hilo de la revelación divina entra en fanatismos; y en vez de ayudar, lo que hace es daño; y a nadie le interesa tener una persona o personas que estén interrumpiendo el Programa Divino, que estén causando problemas. Por lo tanto, es importante entender estas cosas y saber que cada persona permanece en su lugar, y ahí verá todo lo que Dios está haciendo en ese tiempo.
Cada ministro es responsable de tenerle los mejores equipos posibles para que vean todo lo que estará sucediendo. Así que cada pastor, cada ministro, está llamado a tenerle lo mejor a su congregación.
Estamos en un tiempo de gran expectativa de lo que Dios ha prometido y en lo que Dios ha prometido.
Sabemos que está cerca la gran tribulación, que será el lapso de tiempo de tres años y medio, que corresponde a la segunda parte de la semana número setenta de la profecía de Daniel, capítulo 9, versos 21 al 27; pero no tenemos que tener miedo a la gran tribulación.
Cuando esté ocurriendo la gran tribulación, los creyentes en Cristo, las vírgenes prudentes, estarán en la Cena de las Bodas del Cordero con Cristo, en la dimensión de Dios, la Casa del Padre celestial, la séptima dimensión. Así que no hay que tener miedo a la gran tribulación.
LA VISITACIÓN ANGELICAL A LA FAMILIA HUMANA
Dr. William Soto Santiago
Domingo, 30 de marzo de 2014
Cayey, Puerto Rico
Tenemos la promesa, también, de que habrá una manifestación plena de Dios en medio de Su Iglesia, así como hubo manifestaciones temporales en Su Iglesia, de etapa en etapa, de edad en edad, en donde el Espíritu Santo se manifestó por medio de un mensajero e hizo realidad lo que estaba prometido para cada edad.
Para nuestro tiempo también habrá una visitación angelical, y habrá una manifestación plena de Cristo en Su Iglesia, para coronar el Programa Divino, y coronar así la Iglesia del Señor Jesucristo. Y así completar Su labor con un Sello de Oro en una Edad de Oro, que corresponde a nuestro tiempo.
Será la visitación angelical mayor, que Dios haya llevado a cabo en medio de la familia humana; porque con esa visitación nos va a dar la fe para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero. Con esa visitación nos revelará el misterio del Séptimo Sello, el misterio de la Segunda Venida de Cristo, que es el misterio más grande de la Biblia. A tal grado que Jesús dijo que nadie, ni en el Cielo, sabía cuándo sería el día y la hora. El día y la hora ¿de qué? De la Segunda Venida de Cristo.
(…) Por lo tanto, la Venida o manifestación del Hijo del Hombre plena, para el Día Postrero, Su manifestación final, será en el occidente. Eso será lo que verán los judíos y dirán: “¡Este es el que nosotros estamos esperando!”. Y ahí lo vamos a dejar.
Y no sé si tendremos que esperar hasta que llegue el momento de la apertura del Séptimo Sello, el cual los Siete Truenos, la Voz de Cristo, abrirá a Su Iglesia en este tiempo final, en la Tercera Etapa, para darnos la fe para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero.
LAS OBRAS DE JESÚS AL ENTRAR A JERUSALÉN
Dr. William Soto Santiago
Domingo, 13 de abril de 2014
Cayey, Puerto Rico
Cada año, y muchas veces en el año, recordamos esa entrada de Cristo a Jerusalén; y así no se nos olvida ese evento tan importante, que debe ser de enseñanza para no cometer el mismo error que fue cometido en la Primera Venida de Cristo cuando lo rechazaron. Y el cristianismo debe tener conocimiento de esta parte histórica para que no cometa el mismo error que Israel cometió dos mil años atrás.
El reverendo William Branham dijo que la Venida del Señor será sencilla; por lo tanto, esperamos algo sencillo a la vista humana, pero grande ante la vista de Dios. Y será Dios cumpliendo lo que Él prometió llevar a cabo en este tiempo final.
Así es como lo reconoceremos: al Él estar cumpliendo cada una de las promesas que Él hizo para este tiempo final para Su Iglesia, y luego para el pueblo hebreo. Nadie más podrá cumplir esas promesas, de las cosas que han sido dichas que Cristo en Su Segunda Venida va a llevar a cabo.
Por eso fue que Cristo dijo: “Velad”. ¿Velad por qué? Por la Venida del Señor para el tiempo correspondiente.
Todo el tiempo el pueblo de Dios tiene que estar velando por la Venida del Señor: que no se les pase por encima como les pasó dos mil años atrás a la gente de aquel tiempo. Porque a quien se le pase por encima: pierde la bendición de Cristo que Él tiene para Su pueblo para este tiempo final.
En las obras que Cristo estuvo haciendo cuando entró a Jerusalén, mostró por las obras quién Él era. Él decía: “Si ustedes no creen en mí, crean a las obras; porque ellas dan testimonio de mí”.
¿Cuáles eran las obras que Él hacía? Cumplir. Cumpliendo lo que Dios había prometido que el Mesías haría en Su Primera Venida. Esas obras eran las que daban testimonio de quién Él era.
Por eso Él decía: “Escudriñad las Escrituras; porque ellas dan testimonio de mí”. Ellas son… [San Juan 5:39]:
“Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí”.
Por lo tanto, las Escrituras siendo cumplidas bajo el ministerio de Jesús daban testimonio que Jesús era el Mesías; porque nadie más podía cumplir esas Escrituras. Era Dios en y a través de Jesús cumpliendo Su Palabra prometida, Sus promesas para aquel tiempo; así será para este tiempo final.
Por lo tanto: “Velad y orad que seáis tenidos por dignos de evitar todas estas cosas (juicios divinos que van a caer sobre la Tierra, en la gran tribulación), y estar en pie delante del Hijo del Hombre (estar en pie delante del Señor en Su Venida para el tiempo final)”. [San Lucas 21:36].
Todo va a ser sencillo. Lo veremos cumpliendo lo que Él prometió llevar a cabo en este tiempo final; lo veremos sonando, tocando, la Trompeta Final; lo veremos abriendo el misterio del Séptimo Sello; lo veremos cumpliendo cada promesa que Él ha hecho para este tiempo final; y luego lo veremos transformándonos a todos nosotros en este tiempo final: esa será la señal más grande.
Pero antes de eso, tenemos que creer todas las promesas que han sido hechas para Dios cumplir en este tiempo, y verlas a medida que van siendo cumplidas.
Impreso en Puerto Rico