ESTUDIO BÍBLICO #231
DOMINGO, 21 DE AGOSTO DE 2022
TEMA: EL MISTERIO DE LA PALABRA DE DIOS: ALIMENTO A SU DEBIDO TIEMPO
Dr. William Soto Santiago
Lunes, 15 de septiembre de 1997
Choluteca, Honduras
Escritura: Amós 8:11-14 / San Mateo 4:4
DIOS PROVEYENDO LO QUE FALTA PARALA CULMINACIÓN DE SU OBRA FINAL
Dr. William Soto Santiago
Domingo, 7 de septiembre de 2014
San Salvador, El Salvador
Pero no sabemos en qué año del milenio postrero, del séptimo milenio de Adán hacia acá, ha de ocurrir la resurrección de los muertos y la transformación de los vivos; pero ocurrirá en el Día Postrero, que es el séptimo milenio de Adán hacia acá.
Para lo cual, viene una preparación de parte de Dios, para tener la fe para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero; para lo cual Dios proveerá lo que nos falte para obtener esas bendiciones.
Tenemos la Telebendición, en donde estamos bien unidos en ese proyecto de la construcción de la Gran Carpa Catedral, donde esperamos una manifestación grande de bendición de parte de Dios por medio de Jesucristo en Espíritu Santo en medio de Su pueblo; una bendición que cubrirá todo el planeta Tierra.
(…) El reverendo William Branham dijo también de la Visión que tuvo de esa Gran Carpa Catedral, la manifestación gloriosa de Cristo, esa manifestación en toda Su plenitud donde llevó a cabo cosas que fueron hechas cuando él estuvo en la Tierra. Habrá sanidades, milagros y todas estas cosas; y sobre todo, la predicación de la Palabra del Señor para el Día Postrero, que dará la fe para ser transformados a los creyentes en Cristo y ser llevados a la Cena de las Bodas del Cordero.
Eso será lo que nos dará la fe para nuestra transformación: lo que estará sucediendo y hablando Cristo por medio de Su Espíritu a Su Iglesia, en el cumplimiento de la Visión de la Gran Carpa Catedral.
Por lo tanto, deseamos que Dios nos provea lo que falta para esa gran culminación; y que pronto se concluyan todos los trabajos físicos que hay que hacer, lo que corresponde a la parte física que la Iglesia tiene que llevar a cabo, para que venga la culminación final de parte de Cristo en medio de Su Iglesia.
Lo que Dios nos dará, nos hablará, será lo que habló a Juan el apóstol en Apocalipsis, capítulo 10, cuando descendió del Cielo envuelto en una nube y el arco iris sobre Su cabeza, y en Su mano derecha un Librito abierto, que es el Libro que había estado sellado con siete sellos, y clamó como cuando un león ruge.
¿Por qué clamó como león? Porque ya para ese tiempo no será como Cordero, ya no estará como Sumo Sacerdote, sino como León, como Rey de reyes y Señor de señores.
Y lo que nos estará hablando ahí será el misterio de Su Segunda Venida, que nos dará la fe para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero.
Por esa causa fue que a Juan no le fue permitido escribir lo que los Truenos hablaron, porque el contenido de los Truenos es el contenido del Séptimo Sello de Apocalipsis, capítulo 8, verso 1; el cual, cuando fue abierto en el Cielo hubo silencio, nada se movió, silencio por completo para que nadie supiese – nadie supiera el contenido del Séptimo Sello; nadie conociera el misterio de la Segunda Venida de Cristo, para que no pudieran imitarlo; porque siempre surgen imitadores que tratan de obstruir el Programa Divino; y algunos, pensando que lo están haciendo bien, están siendo instrumentos del enemigo y están estorbando el Programa Divino.
Recuerden, en el tiempo de Moisés se levantaron también opositores al Programa Divino; en el tiempo de Jesús también, en el tiempo de los apóstoles también; también en el tiempo de los profetas hubo opositores a los profetas y a la Palabra de Dios que ellos hablaban.
Siempre habrá esa lucha. Y si el enemigo no sabe lo que Dios va a hacer, entonces no puede imitar; porque una imitación es algo… una copia del original, pero no es el original.
Es que Dios quiere que Su Iglesia sea la que conozca ese misterio cuando le sea revelado bajo el Séptimo Sello, cuando le sea revelado bajo el capítulo 10, 8 y 10 de Apocalipsis; o sea, la Voz de Cristo revelando ese misterio, hablando en forma consecutiva en Su Iglesia en este tiempo final, en la etapa de oro de la Iglesia, la etapa de Piedra Angular.
En las otras edades habló y hubo un intervalo, un intervalo de una edad a otra; de ese intervalo de una edad a otra hubo un instrumento diferente de Dios para cada etapa. Pero en el tiempo final Cristo hablará en forma consecutiva a Su Iglesia, abriéndole el misterio del Séptimo Sello, y dándole a conocer lo que Juan escuchó y no le fue permitido escribir. Pero la Iglesia lo escuchará en este tiempo final, en la Venida del Ángel Fuerte que desciende del Cielo en Apocalipsis, capítulo 10; y eso es la Venida del Señor a Su Iglesia.
Él estará como León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de señores; por eso dice que clamó como cuando ruge un león, y siete truenos emitieron Sus voces; porque Él es el León de la tribu de Judá, el Rey de reyes y Señor de señores, como aparece en Apocalipsis, capítulo 19, versos 11 en adelante.
Así que una grande bendición viene de parte de Dios para los creyentes en Cristo, para la Iglesia del Señor Jesucristo en medio del cristianismo; por lo cual, tenemos que prepararnos delante de Dios, estar atentos al Programa Divino, esperando esa culminación final de parte de Dios en y para la Iglesia del Señor Jesucristo.
Cuando eso ocurra, ya se habrá completado la Iglesia del Señor; pero mientras tanto se da la oportunidad a las personas que reciban a Cristo como único y suficiente Salvador.
Impreso en Puerto Rico